viernes, 2 de noviembre de 2012



Confianza

Confianza, confianza es lo que un mortal necesita,
me gusta tenerla cada que puedo.
Explayar todo lo que llevo dentro,
sin tener preocupaciones,
y al comienzo de cada año esa es la propuesta,
extender la mano a quien falla,
y se cree que puedes tenerte entre todos,
sin que te acuchillen en la espalda.
No habrá temores aunque sea muy de noche.
¿Y quien sabe? Hasta te podrían  cobijar.
Y sé que picaríamos las piedras,
sin hacer ninguna pregunta, solo sé que lo haríamos,
y al término de una dura  jornada,
nos echaremos a mirar  las estrellas,
soñaremos en tener hijos y una perfecta familia,
en sacarnos la lotería, en ser viejos y morir en paz.
Pero.
Sabes que algo te preocupa y algo me inquieta,
y me encuentras cavando tierra,
creyendo que he caído mentalmente,
solo un milagro hará girar tu cerebro,
solo un milagro quitará tu mirada vacía.
¡Creo que debí haberte dado un plomazo en medio de los ojos!
Después de todo, nuestros brazos no retuercen,
en todo este tiempo, el verde pasto se ha ido secando,
solo eres un viejo tronco seco
¿Quién necesita  un tronco como tú?
Finalmente la tierra te tragará,
y recordaremos
tu persona y a mi persona,
y sabremos como el hogar se nos hace dulce,
y el infierno somos nosotros,
y la oración no pasa del techo,
y las piedras son apiladas en la mano,
y el silencio es buscado,
y las filas te obedecen,
y este juego lo juegas,
y te mantienes al pendiente,
y nadie te hará ganar,
y tú no me ganarás,
y tu lengua te ahorcará,
y buscaras a quien encontrar,
y a ver quien será el cabrón que te vuelva a escuchar

                                                                                                Paulino Lucas Vázquez

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